lunes, 18 de noviembre de 2013

Ahora no decido, solo escribo!

Corazón herido y sangrando, entre colores y grises matizados, todo se entrelaza y se entremezcla con varias realidades al unísono, divagando y manteniendo el equilibrio sobre un dolor fino y persistente...

La verdad juega al escondite y pone visibles las fronteras que hay entre nosotros y lo sublime, tan fuertes en nuestras jaulas, tan frágiles en libertad que de desgarros vamos servidos en cada costado, sobrevivimos a tempestades propias y arrojamos las de los demás frente a los muros de nuestra propia ignorancia, dependemos de ideales y creencias que ni siquiera necesitamos.

Las dudas y la seguridad se confunden frente a lo incierto y desconcertante, lo denso y oscuro nunca descansa, siempre insiste...las envestidas son constantes, la debilidad adquiere una piel dura y callosa, el lóbulo frontal izquierdo se colapsa creando nuevas conexiones, el derecho se relaja en la creatividad y la expresión, lo físico parece oxidado...

La derrota y la victoria, el caos y la claridad, lo superfluo y lo esencial, quien es que?

El peligro del futuro, inexistente ahora, tanta gente sometida a el, basando sus vidas en algo tan irreal, por que?

Escribo desde el dolor para comprenderlo, desde el caos para esclarecerlo, escribo para verme y vernos...a todos.

La tensión es exagerada, la vibración se distorsiona frente a la avalancha de momentos que no fueron expresados, ahora haciendo cola se amontonan, empujando y tirando en diferentes direcciones, me mantengo quieto y vivo, libre...prefiero.

La libertad, esa tan nombrada escena, pero somos libres de verdad?

Alguien sabe que es realmente la libertad?

El fracaso siempre es una oportunidad para llegar al éxito, el éxito que anhelo realmente me librará del fracaso?

He estado en tantos mundos, perfilando mis ideas, recolectando y saboreando los frutos de mis actos en ellos, que ahora vivo absorbido en los millares de furúnculos emocionales que nacen y brotan en mis cuerpos astrales, ya no se a quien o que estoy sintiendo.

Permanezco aquí, dónde el pensamiento se detiene, donde el sentimiento se libera, donde la verdad ya no se esconde, permanezco aquí donde veo que nada tiene sentido, ni falta hace, ...permanezco vivo o eso parece mientras respiro y me encuentro con tumultos de represiones que me invaden y se apoderan del presente, lo permito y me pierdo de vista, lucho y exhausto me abandono, he muerto pero sigo, permanezco vivo...quizás haya perdido mi corazón y por eso no siento un solo latido..., siento un cúmulo.

Me necesito conmigo, ...

Ahora no decido, solo escribo!